martes, 30 de agosto de 2011


12 comentarios:

Anónimo dijo...

Este comentario tiene sentido en los USA, pero no en Spain.

Anónimo dijo...

En España no se ha metido déficit para ayudar a los bancos.

Se ha metido deuda (el estado ha prestado dinero que ha pedido a su vez) y se ha metido dinero del Fondo de garantía de depósitos que no es déficit porque lo ponen los bancos.

Ya se que a nadie le importa un higo, que la gente cree lo que le da la gana y que pensais que miento, que los bancos tienen la pasta.

Pero la realidad no son los deseos. Mola tener enemigos fáciles.

El chiste a pesar de erróneo es gracioso.

elNoZiYa dijo...

al anónimo de las 12:01, A nivel contable no será lo misom, pero ambas cosas, déficil y deuda, las tendrá que pagar el estado antes o después, ¿no?

MEL dijo...

ANÓNIMO: Sí,tienes razón, creo que el texto de la viñeta no es rigurosamente cierto (estoy siendo autodidacta en esto de la economía y a veces me bailan los términos). Pero el espíritu del chiste sí lo es.

En el momento de ayudar a los bancos no entramos en déficit, pero ponemos el primer clavo en el ataud. El endeudamiento que supone esta ayuda, más la inversión en proyectos de estímulo económico (imprescindibles por la crisis, aunque parece que no se hicieron bien), más la caida de ingresos públicos, es lo que nos lleva a entrar en déficit. No se puede ignorar que, de no haber inyectado esos 30.000 millones de euros, nuestro endeudamiento no sería exactamente el mismo.

Creo...

indignado dijo...

Este comentario de anónimo es el típico que también suelen hacer muchos supuestos "entendidos", complacientes con los argumentos de los poderosos: argumentar incorrección (que implícitamente sugiere escaso o nulo conocimiento) para desacreditar ("mola tener enemigos fáciles") la crítica a desaguisados tan evidentes como que el Estado haya salvado, y sin condiciones en la práctica, a quienes son los máximos responsables de la crisis, aumentando el endeudamiento público en el mismo momento en que ese Estado incurría en mayor riesgo de aumentar el déficit público (que debiéndose a la pérdida de ingresos es la consecuencia y no la causa de esa misma crisis) y en el momento en que además la inversión pública es más necesaria para reactivar la economía en "recesión" "crisis" "depresión" o como les de la gana etiquetarlo a día de hoy a los "expertos" -¿científicamente?-)

indignado dijo...

... y ahora, para salir de la crisis con los beneficios garantizados grandes empresas y bancos (estos últimos los mantienen incluso ahora, en plena crisis), y para salir con los "sueldecillos" intactos a sus directivos (desorbitados para los demás mortales y sobre todo para muchos ignorantes que no entienden nada de economía) lo mejor es disipar toda amenaza futura de gasto público (salvados ya ellos) y por tanto del riesgo de una subida de impuestos en un futuro lejano (incluso reactivada ya la economía)
... ¿cómo? blindando (por ley y no cualquiera: la Constitución) el límite de déficit del Estado y, también, también, aunque el chiste no lo diga, el nivel de endeudamiento del Estado (exigiendo además prioridad, y absoluta, que se pague a quienes prestan y que son los mismos en buena parte (no contaremos a China verdad; ¿sí a los jeques del petróleo?) que fueron salvados en su día aquellos pobrecitos banqueros de Europa y "los USA") a los que había que ayudar por el bien de todos...ya se ha visto

indignado dijo...

está visto que a muchos les importa un higo que la gente más necesitada y que más sufre la crisis pierda servicios públicos y apoyo económico ...esos pobres diablos que no saben nada de economía

indignado dijo...

... menudos "enemigos fáciles" que tenemos: además de los "expertos" que revisten con argumentos técnicos sus intereses ahora ya tienen el de los políticos y la ley máxima
Por cierto al Anónimo (que no Anonymus) sólo le ha faltado decir para ser más "correcto" aún (y así coincidir los representantes de la banca) que en realidad el estado no "dió" (término de ignorante económico donde los haya; en economía nada es gratis... y ahora se ve para algunos) ningún dinero a la banca sólo les compró toda la chatarrería de activos (dicen que tampoco es exacto que fueran "activos tóxicos" -palabro que demuestra afán científico sin igual) que no podía "colocar" en ningún lado ... en fin

Anónimo dijo...

para el segundo anónimo, el listillo analfabeto (Mel, NO estabas equivocado, pq lo evidente es evidente, aún cuando lo pretendan enmascara con una jerga PSEUDOcientifiquilla):
"art. 135.3 .... Los créditos para satisfacer los intereses y el capital de la deuda pública de las Administraciones se entenderán siempre incluidos en el estado de gastos de sus presupuestos y su pago gozará de prioridad absoluta. "
es decir, la duda y los créditos cuentas como negativos en el balance, y por lo tanto, si este sale deficitario es pq han contribuido a ello. Y por lo tanto, son CULPABLES del déficit.
ve a dar, segundo comentarista, la lata a otro lado, o q te enchufe Rato o el violador en el BM o en el FMI o en cualquier otro de esos sitios donde los expertillos analfabetos se enriquecen a costa de los demás. O ve a la guardería pa aprendé a leé, pisha.

Paco dijo...

"solo es una cuestión contable que las inmensas cantidades de ayuda a la banca privada que se han arbitrado en todos los países, no entren en el cálculo del déficit público no financiero que es el que cuenta a estos efectos, ya que son préstamos financieros, aunque sí sumen en la deuda pública. Este hecho, por cierto, deja fuera a los rescates a la banca de las restricciones sobre estabilidad presupuestaria excepto las mucho más laxas del endeudamiento." Jordi Sevilla (http://blog.jordisevilla.org/2011-08-30/la-reforma-constitucional-y-nosotros/)

Creo que queda claro...

Microalgo dijo...

A ver, a ver, que la palabra "cinetífico" se está vituperando por acá. Y no debe haber menos científico que un economista... a la vista de los resultados.

Anónimo dijo...

sastamente microalgo.por eso he usado la expresión "pseudocientífiquilla", y luego me refiero a esos supuestos "expertos" q pululanpor tos laos.